Madrid: todo por la patria, nada por España.

La independencia de Catalunya haría desaparecer España como Yugoslavia.

«Madrid es España dentro de España. ¿Qué es Madrid si no es España?» dijo la Ayuso.

Lo increíble es que, aunque parezca un matrimonio de conveniencia, no es ni eso.

Ni la propia Ayuso estaba convencida de sus palabras, propias de la euforia del indigente intelectual con poder. Realmente lo que quería decir es que Madrid es España si puede seguir vampirizando sus empresas y si sus privilegios por ser capital de una 'España con Catalunya' siguen intactos.

Es más, solo le faltó rematar que Madrid se debe servir de España por imperativo legal.

 

Haciendo un poco de historia reciente, nunca perdonaré que nuestros políticos catalanes se rajarán por dos veces con lo de la independencia de Catalunya; la primera fue con el coitus interruptus de Puigdemont y, la segunda, una vez declarada la República, no se pasaron toda la noche redactando decretos ley...

 

Todo el mundo sabía (menos los catalanes) que esos momentos pudieron representar el fin de lo que había sido un imperio. De esa, España ya no se recuperaba...

 

España poco podía hacer para evitar la independencia salvo crear una guerra civil dentro de Catalunya que ya hubiéramos visto cómo habría terminado o si hubiera ocurrido.

En todo caso, esa proclamación efectiva de la república catalana (con más o menos intensidad de violencia) era la espoleta de la 'bomba' España.

 

Y no hablaré del golpe moral porque es evidente (solo falta ver el auge de VOX), sino del económico.

La independencia de Catalunya hubiera representado la ruina para España de un día para otro. Y tampoco estamos hablando de primas de riesgo y bonos porque estoy convencido que la UE le hubiera echado un cable en ese aspecto.

España se hubiera ido al garete porque de repente perdería la cuarta parte de sus ingresos, cantidad que no tiene nada que ver con el déficit fiscal de 16.800 millones de euros, sino de 43.000 millones que es lo que recauda en Catalunya fruto del esfuerzo de pymes y autónomos. Dinero que manosean funcionarios de Madrid y que devuelven con dos años de retraso mediante inversiones que mayoritariamente les aporta beneficios a ellos y a sus empresas.

 

Y ya sé que se preguntarán: ¿por esa cantidad se va todo al garete?

Sí, porque no es solo esa cantidad sino la repercusión de perder 7,6 millones de habitantes. Los primeros que deberían reducir plantilla sería los ministerios de Madrid. ¿Y dónde recolocaríamos a los policías y guardia civiles que todavía deambulan por Catalunya? ¿Habría dinero para seguir manteniendo al Hipódromo de la Zarzuela? (perdón por la ironía).

¿Qué pasaría con AENA? El aeropuerto de El Prat representa la mitad de sus beneficios...?

También veríamos como todas las empresa del Ibex 35 disminuirían sus plantillas en Madrid para abrir sedes en Catalunya, donde pagarían sus impuestos por los clientes catalanes.

Y podríamos continuar horas hablando, desde las quiebras de algunas federaciones deportivas hasta la pérdida de embajadas...

Ya que he citado Madrid, continuemos con el protagonismo que tendría esa comunidad inventada con la destrucción de España; tanto o más que Catalunya.

 

De repente Madrid vería como docenas de miles de trabajadores perderían sus empleos. La hiperventilada, supernacionalista española y ultra Madrid se levantaría más facha que nunca y más insolidaria que nunca.

Sin el 'maná' catalán las demás autonomías verían que no pueden pagar su Sanidad ni el más elemental funcionamiento de sus deficitarias comunidades. Piensen que, sin Catalunya, y lo que representan sus habitantes pagando por servicios españoles, habría comunidades que perderían varios miles de millones de financiación. Es entonces cuando pedirían que Madrid aportara más y que se repartiera mejor el efecto capitalidad. Algo que los madrileños se negarían.

Y ya la tendríamos liada...

 

El mejor chantaje para eso sería que alguna región amenazara con también declarar la independencia. Es entonces cuando España y Madrid (o «Madrid es España dentro de España») deberían tomar una decisión...

La posibilidad no son muchas. Madrid sin ser la capital de España terminaría reducida a una 'Extremadura'. ¿Puede Madrid 'pasar' de España y convertise en una ciudad estado tipo Hong Kong? A corto y mediano plazo, no.

 

Por lo que tendríamos un Madrid que no querría ser solidario y una periferia que pediría más. Por lo tanto, los números no salen...

 

En esta nueva realidad, El País Valencià y les Illes también se negarían a sufrir más el déficit fiscal crónico que padecen. O sea, que los 16.800 millones de déficit fiscal se convertirían en unos 24.000 o 62.000 millones si lo contamos como recaudación tributaria (aunque realmente es más al no tener sedes del Ibex 35).

 

España quedaría convertida en un duro y puro estado federal sin apenas solidaridad, con un Madrid que perdería las sedes; o en una dictadura; o sufriría una desmembración tipo URSS o Yugoslavia.

O lo que ustedes crean...

 

Y todo este efecto dominó vendría porque el régimen del 78 apostó por expoliar a Catalunya al mismo tiempo que favorecer a Madrid.

Por lo tanto, se crearon dos dependencias incontrolables a la larga.

 

Repito, para concluir, España no solo se quedaría sin la que aporta el mayor PIB productivo y la mayor cantidad de impuestos devengados por trabajadores, además se enfrentaría a un Madrid que no querría perder sus privilegios, aunque inevitablemente su economía y sus administración verían reducir 'músculo', algo que alimentaria al fascismo ya creciente en esa comunidad.

 

Por cierto, el País Vasco y Navarra se confederarían porque allí no quieren perder su fuero ni los que votan al PP...

 

Jordi Català


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