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El PP critica a Ciudadanos por alimentar la confrontación en Catalunya, mientras Rivera acusa al PP de asumir el discurso separatista. Los lazos amarillos siguen ocupando protagonismo en Catalunya desde que el 16 de octubre de 2017, día en que fueron encarcelados  Jordi Sànchez   y   Jordi Cuixart , las entidades independentistas Asamblea Nacional Catalana y Òmnium Cultural pidieron hacer uso de lazos amarillos para reivindicar la liberación de los políticos catalanes encarcelados. Lazos amarillos pequeños para llevar en la ropa, lazos gigantes desplegados en lugares públicos, sillas vacías con lazos, lazos en vallas, lazos en edificios como ayuntamientos​, hospitales, instituciones públicas, gente vestida de amarillo o agrupada en forma de lazo en concentraciones… En definitiva el amarillo inunda ya Catalunya. La pasada semana pudimos ver como Rivera e Inés Arrimadas daban un paso más en el camino de la confrontación y provocación yendo a quitar lazos amarillos a la pobla

No es necesario ser independentista para entender que la solución del “problema catalán” no pasa por ir retirando los lazos amarillos de las calles, que reivindican la puesta en libertad de los presos políticos independentistas. Estos días hemos podido ver como las que se autodenominan “ brigadas de limpieza “ , que se dedican a retirar los lazos por la noche, daban un paso más cambiando su atuendo. Ahora van ataviados con un mono blanco de plástico y bufanda blanca con la que se tapan la cara y solo dejan al descubierto sus ojos, al más puro estilo  Kukusklan siglo XXI . Hasta ahora los independentistas catalanes han conseguido mostrar su repulsa de forma pacífica ante la situación de los presos políticos encarcelados por las decisiones de la Justicia, como consecuencia de la postura del Estado, y el color amarillo en forma de lazo ha sido el elegido para significarla. Playas y calles han lucido este verano lazos amarillos y los dirigentes de ciudadanos, Rivera y Arrimadas