Ningún partido político español quiere en su currículum la independencia catalana
Hace tiempo se barajan diferentes teorías sobre la
independencia de Cataluña, alguna relacionada con el gas y Rusia, otra
relacionada con el rescate económico de España, o con la necesidad de la UE de
frenar la ola de independentismo que cada día es más grande en muchas regiones
europeas, lo cierto es que hay demasiadas, o al menos suficientes, pero la que
menos se tiene en cuenta es la catalana.
La del pueblo, la del hartazgo, esa que sentimos día a
día después de leer, ver y padecer tanta injusticia, esa teoría que ya deja de
serlo para convertirse en una realidad, la realidad catalana, entregar 10 al
estado español y recibir 6, o menos, en cuotas, y a veces con interés, interés
que luego para pagarlo hay que pedir “préstamos” a España, con más intereses, y
que después de todo este despropósito, nosotros, los catalanes, somos los
culpables si se cierra la cama de un hospital (cosa que está sucediendo en todo
el estado español), o si falta un “barracón” en alguna escuela, pero esto no es
todo, porque teniendo las cuentas intervenidas por el maldito 155, aún así,
somos culpables de la patética administración que terceros hacen con NUESTROS aportes.
Pero la culpa no es del todo de España, parte de la
culpa es nuestra, por no saber o no querer “levantarnos” antes.
El infrafinanciamiento catalán no es un tema nuevo, el
Estatut no se nos negó ayer, fue hace años, si bien es cierto que el independentismo
ha ido creciendo, la presión a nuestros representantes no ha estado la
suficiente para evitar llevarnos las sorpresas de las que somos víctimas desde
hace meses.
Ahora
ya estamos en camino, tenemos la ventaja de tener un escenario favorable,
Europa, eso significa que si sabemos vender bien nuestro producto (La República
Catalana) tenemos muchas posibilidades de ganar, debemos dar gracias de que el
“enemigo” no es de los más astutos
El
estado español no para de dejarse en evidencia constantemente en el ámbito
internacional, y eso les pasará factura, esa Europa de libertad e igualdad que
siempre nos han querido vender desde la EU está ahora en suspenso, porque se
han descuidado controlar a uno de los suyos.
A ese
que es lider en corrupción, a ese que apalea a la gente por votar y que después
su Ministro de Exteriores se pasea por el mundo afirmando que son “fakes news”.
A
ese que quita y pone euroórdenes como si fueran los manteles de un restaurante,
a ese que envía documentación a juzgados extranjeros mal traducidas o sin ni
siquiera hacerlo, a ese que te envía a la cárcel por rapear y te libera por
violar.
A
ese que te investiga por unas urnas y te regala dinero por el caso “Castor”, a
ese que te dice que no hay dinero para las pensiones pero para un submarino que
al final ni siquiera flota, tiene millones y millones.
A
ese Gobierno español que por una pelea de bar o por cortar una carretera te
enjuicia como terrorista y por pagar a un confidente del CNI que resulta ser un
terrorista decide no investigar, y así una lista interminable, lamentablemente
interminable.
Esa es la España de la que
Cataluña se quiere ir, aunque algunos se empeñen en repetir hasta el cansancio
que los que viven en una “Matrix” son los independentistas, creo los hechos
hablan por sí mismos, ahora depende que quién los interprete, hay una gran
campaña en contra del independentismo, partidos políticos, periodistas,
empresarios, y la justicia tampoco es que sea muy “Indepe”, en ninguno de los
sentidos, al menos para mi y para otros países de Europa, pero el estado
español insiste en que es un problema interno, es tan interno que cada día
vemos portadas internacionales hablando del “tema interno” y no lo hacen
precisamente a favor de las decisiones del Estado español.
Ahora toca resolver el
conflicto catalán, o eso nos quieren hacer creer, espero estar equivocado, pero
la idea es la misma de siempre desde el bando socialista, ilusionar, prometer,
y al final saben que con el cambio de gobierno y la subida del PP todo volverá
a cero, o menos cero como ha pasado ultimamente con el 155.
Ningún
partido político español quiere vivir con el “antecedente” en su currículum de
haber perdido Cataluña, por ende, nadie lo hará, de hacerlo le daría el
discurso en bandeja a la oposición, porque recordemos que en España hacer
oposición es el famoso “y tu más”, no hay un discurso de proyectos de futuro sino
más bien de reproches del pasado, y ese es otro de los motivos por lo que no se
avanza y no se desenquietan del franquismo, a veces pienso que el franquismo
está todavía tan latente en España simplemente porque no conocen otra realidad,
esa realidad inclusiva con la memoria histórica y excluyente con las dictaduras
que se respira en el resto de Europa.
El
gobierno español planea engañarnos otra vez, como con el Estatut, o como con la
supuesta llamada que recibió Puigdemont para que frenara la república y diera
lugar a un diálogo, ahora proponen una votación de una supuesta nueva
financiación, y tal vez por debajo de la mesa le ofrezcan a los partidos políticos
catalanes liberar a sus presos si se acepta esta propuesta, cabe recordar que
los mismos presos políticos han expresado que quieren la libertad pero no a
cualquier precio (mensaje directo a los partidos catalanes), también mencionar
que el estado español nunca cumple, porqué cumpliría con los catalanes el PSOE
si sabe que tiene que “aguantar” el conflicto catalán solamente dos años y
luego que se haga cargo otro?
No hay que esperar nada,
absolutamente nada del gobierno español, no es la primera vez que durante un
proceso de independencia se aplica la siguiente lógica “Encarcela a sus líderes
y dejarán de hablar de independencia para hacerlo de presos políticos”, y esto
es lo que en cierta manera a pasado, no hay que olvidar el objetivo, porque una
vez conseguido el resto se irá solucionando sólo con negociaciones entre
estados, con la dependencia actual parece que quieren conformarnos con migajas,
y no nos dejamos golpear y humillar para eso, ni hay gente en prisión para
vender la república la primera de cambio.
Ahora
es tiempo de ofertas de autonomía, dinero, inversión y mil mentiras más que si
algún día se aplican, cuando vuelva el PP al poder, o suba Ciudadanos,
volveremos a estar como ahora o peor, seguramente peor, espero que nuestros
representantes tengan claro que no votamos autonomía, votamos república, y que
eso no se negocia, después de todo lo que hemos sufrido, hemos madurado tanto
en Cataluña en lo referente a la democracia y a su funcionamiento, que somos
capaces de cambiar de líder o de partido político en un abrir y cerrar de ojos
si vemos que no cumplen con el mandato del referéndum, la clase política
catalana debe entender que nosotros no estamos para propinas, y el que piense
que con un nuevo estatut, o con más autonomía nos vamos a conformar, mejor que
se vaya buscando algo en lo privado, porque en lo público ya no tendrá el apoyo
del pueblo.
Oriol Cots
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