El pesebre de Navidad
Barcelona, entre las calles Josep Anselm Clave, paseo de Colon, plaza del Portal de la Pau y plaza de Medinacelli, se levantaba hasta mediados del siglo XIX un convento de franciscanos, fundado por San Francisco de Asis cuando vino a la ciudad en 1211. Después de dos años decidió marcharse. Cuando lo comunico, sus frailes se quedaron desconsolados y le pidieron que, ya que los abandonaba, les dejara un recuerdo palpable de su presencia. Y Francisco se me tió en su celda y permaneció unos cuantos días encerrado con diversos sacos de tierra y cubos de agua. Llego la víspera de navidad y el santo salió, invitando a los frailes a entrar en su celda. Y encontraron sobre los tablones del lecho una serie de figuritas hechas de barro que representaban el nacimiento: pastores, reyes, camellos, ángeles, san José, la Virgen y el niño. Así fue como en Barcelona, en el año 1213, san Francisco creo el pesebre, y desde esta ciudad se ha hecho llegar al mundo entero.